sábado, 29 de agosto de 2009

""Utilizar" internet."

By Calandrake

A nadie se le escapa que los políticos han visto en internet una gran oportunidad para vender su género. Por una parte están los que se declaran asiduos de las redes sociales y dan ruedas de prensa online para dar fe de ello. Puro pastel, pero se agradece la bufonada para que al menos la muchachada se haga unas risas viéndoles teclear con la técnica del aguilucho.

En otro extremo más penoso están los que solo utilizan internet durante los períodos electorales, como herramienta para aumentar la cuenta de votos. Después del día D, se desconectan y hasta luego Lucas, o sea, logoff Luke.

Muchas son las páginas de políticos que se congelaron en los días que siguieron a la cita en las urnas. La de Ricardo Melchior es una buena muestra de ese abandono. Un año y medio después de las elecciones mantiene en portada frases tan patéticas como: "Las espadas están aún en el aire" o "Habrá que esperar a las próximas horas o días". Se refieren a que en un primer momento, Melchior aún tenía esperanzas de mantener el escaño en el Senado que le arrebató Antonio Deverdátelodigo Alarcó.


Igualmente congelada parece haber quedado la buena disposición que mostraba el entonces candidato para responder a todas las preguntas que se le plantearan. Tres cuestiones fueron planteadas a través de ese enlace (una dirección de email en realidad) y en ningún caso se recibió respuesta.

Aún admitiendo que se trataba de una página dedicada específicamente a la candidatura al Senado y que ya no queda nada que decir al respecto, el dominio reza "ricardomelchior.com". Habiendo sido elegido Melchior presidente del Cabildo Insular, ¿no sería de esperar que la página se hubiera reconfigurado para seguir mostrando esa sonriente disponibilidad desde el Palacio Insular?

Esta efervescencia digital que les entra a los primus inter pares durante las elecciones contrasta con el retraso que muestran las administraciones canarias en la implementación de procedimientos online que hagan más llevadera la vida del sufrido administrado.

"Las espadas están en el aire", dice...
Pues bájenlas ya y pónganse a actualizar la página, hombre (homenaje a Altober).


P.D.: ¿En qué año dejaremos de llamar "nuevas tecnologías" a todo lo que se relacione con internet? ¿Si no dejamos de llamarlas así, cómo llamaremos a lo que venga después?

viernes, 28 de agosto de 2009

"Bendita pachorra"

By Miguelito El Policía



La gente del futuro se cagará en nosotros. Yo casi puedo sentirlo. Ocurre cada vez que una generación se topa de bruces con los excesos de la anterior."...Pero, ¿¡como nadie evito hacer esto aqui?!"A mi me sucede cada vez que voy al Puerto y paso frente al Belair. El artículo anexo data de Febrero de 1972, un tal Luis Pavillard Jardín, consignatario de buques aspiraba a construir un mega-astilleros a seis kilómetros al norte de El Médano. Se cuenta que ya se tenía el visto bueno del entonces presidente del Cabildo Andrés Miranda "quien hizo varios viajes a Madrid , para entervistarse con autoridades del ministerio de Industria y Obras Públicas, que dieron su conformidad". Como ahora, todo en el texto es confuso, "la construcción de grandes petroleros ha bajado mucho porque el mercado está saturado, pero aún así es un negocio rentable". LLama la atención el párrafo que empieza con "entre las razones que alegan sus detractores..." nada de machangadas medioambientales, la preocupación era si se conseguiría mano de obra especializada en Canarias para llevar ponerse al tajo.Esperaban los primeros barcos para principios del 79, por una vez bendita pachorra canaria.Teniendo en cuenta que en esa época nadie "se oponía al futuro" como los del "no-a-todo" actuales se hace díficil adivinar porqué nunca se llevó a cabo semejante maravilla Quizás alguien del futuro escriba un post como este horripilado por lo que les hicimos/estamos haciendo ahora. Perdón.

nota: Pinchando sobre la imagen se amplia y se lee

jueves, 27 de agosto de 2009

"Orco de aeropuerto"

By Calandrake

Hay quién piensa que, después de un viaje, llegamos a Canarias en el momento en que pisamos suelo insular. Mentira nefanda. Estamos ya en Canarias cuando, aún en el aeropuerto de partida, encontramos la puerta de embarque de nuestro vuelo al archipiélago.

Tras superar con éxito la facturación, el control de equipaje de mano y el de pasaportes (si lo hubiere), llegamos a ese limbo en el que escasean los asientos libres y los viejos miran fijamente, como desconfiando, la pantalla que se encuentra sobre la puerta. Los inasequibles al cansancio amagan con formar una cola para esperar de pie lo que podrían esperar sentados, mientras el resto de los pasajeros se relaja y comienza a departir. Es en ese momento en el que comenzamos a percibir el inconfundible acento del terruño y ya podemos decir que, aunque nos encontremos a miles de kilómetros, estamos en Canarias.

En ese entorno de moderada distensión es cuando se viene arriba el orco de aeropuerto. Se trata de individuos (usalmente grupos pequeños) que encuentran una inquietante satisfacción en comportarse como si acabaran de emerger de una caverna tolkieniana. Exteriorizan a gritos una forzada canariedad y se aseguran de que nadie quede fuera de su cono de audiencia. Comentarios zafios y relatos pormenorizados de incidencias en el control de equipajes generosamente sazonados con "ñoses" constituyen el repertorio más habitual.

Cada cierto tiempo, el orco mira de reojo al resto de la sala, como calibrando el éxito de su última ocurrencia megafónica. Si la cosa no arranca, puede recurrir a la música y para ello emplea el móvil del que surgen estridentes sonidos. La iniciativa suele ser recibida con palmas por su corrillo. En alguna ocasión, el orco ha improvisado partidos de futbito usando papel de periódico para confeccionar la pelota.

Si encuentras un grupo de orcos en tu puerta de embarque, no intentes distraerte leyendo porque jamás podrás concentrarte en medio del festivo barullo que organizan. Lo mejor que puedes hacer para evadirte es mirar la pantalla, como los viejos.

El orco no es malo. Simplemente se revela incapaz de controlar la alegría que le invade al vover a casa tras una interminable contención de la canariedad. El orco es feliz porque se acabó el llamar altramuces a los chochos y cerveza a la garimba y, sobre todo, porque regresa a ese lugar en el que nadie te mira raro por hablar a gritos.

Avisado quedas.

miércoles, 26 de agosto de 2009

"Noticias del mundo"

By Miguelito El Policía




Desde Paris, la ciudad del amor, un forero nos envía estas símpaticas fotos. Un bello paisaje y una camiseta con mensaje. Toma nota Sarkozy quizás en el futuro emitan una versión francesa de "no corras que es peor"

sábado, 1 de agosto de 2009

"Mira lo que hago"

By Calandrake


Se ha oído decir que durante las olas de calor se incrementa el índice de actos violentos. Según parece, las altas temperaturas inducen un cierto nivel de emputecimiento que predispone al parroquiano a la riña sudada y tumultuosa.

Pero eso será en otros sitios con más mala leche. Aquí cuando aprietan los calores, nos cogemos un ciego y echamos un bailecito. Y da igual que no haya música, ni pista de baile, ni nada de nada.

Ayer, quienes transitaban a media mañana por el Puente Serrador (Santa Cruz de Tenerife), pudieron admirar la enloquecida danza de un señor que eligió la baranda del puente para ejecutar sus coreografías. Cuando mejor estaba la cosa, vino la policía y mandó a parar, con la tibia excusa de que el individuo estaba borracho, semidesnudo y tambaleándose sobre la baranda de un puente.

El periódico La Opinión se hizo eco de esta historia y es una verdadera pena que no hayan permitido 'comentar la noticia'.