La Tocata y fuga en re menor, BWV 565, es una de las piezas más populares de Johann Sebastian Bach. Se cuenta que el genial compositor la usaba para probar los órganos ya que "la abertura con sus tres semitrinos iniciales y el uso masivo de acordes arpegiados, serviría como una buena prueba para el sistema de viento". Sin duda es una bella obra que ha inspirado a muchos artistas sobre todo en el cine.
En Canarias la inspiración se transformó en pestilencia. Para la empresa Hernández Bello (Limpieza de arquillas sépticas y pozos negros) la estremecedora melodía evoca "como huele de mal una fosa séptica llena", o sea, un agujero lleno de mierda. Sin duda una bella analogía que haría las delicias del genio alemán. Enhorabuena a todos.
Gracias
Queremos más de estas joyas...
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